Ayo Ayo, 11 de enero (El Nuevo Cambio).- La Marcha por la Vida reinició hoy su segundo día de caminata, rumbo a la localidad de Calamarca, alrededor de 23 kilómetros, a la cabeza de los dirigentes del Pacto de Unidad que ratificaron su decisión de llegar hasta la ciudad de La Paz y concentrarse en la Plaza Murillo.
La movilización comenzó este viernes desde la localidad de Patacamaya y en el primer tramo, los marchistas, alrededor de unos 3.000, entre hombres y mujeres, una buena parte jóvenes, llegaron después de haber caminado aproximadamente unos 18 kilómetros en unas cuatro horas.
Los marchistas pernoctaron en coliseos y cubiertos con frazadas ante un intenso frío y una llovizna permanente y cesó en la mañana, precisamente cuando se reanudo la movilización con destino a la sede de gobierno.
El senador Leonardo loza dijo que la marcha es pacífica y tiene el objetivo de lograr del gobierno la atención a los graves problemas económicos del país, que afectan fundamentalmente a las familias de menores recursos económicos, además de que se garantice la provisión de combustibles, frenar el alza de los precios de la canasta familiar, la provisión de dólares y la inmediata liberación de los “presos políticos”.
“A esta marcha van a seguir sumándose, hay flotas y flotas de compañeros que están viniendo para engrosar y llegar miles y miles como está programado el lunes a la plaza Murillo”, dijo Loza.
“El movimiento indígena campesino jamás ha sido egoísta y siempre hemos luchado. Esta marcha va a reivindicar las grandes necesidades de todo el pueblo”, sostuvo al señalar que “Nos dicen que somos violentos, que estamos yendo a La Paz a hacer un golpe de Estado. Están temblando. Esta marcha es pacífica, no tenemos por qué generar violencia o maltratos”, añadió.
