Hoy nace “El Nuevo Cambio”, como periódico digital y con la ilusión de que crezca sano, fuerte y sobre todo que sea útil para servir a la patria, a los más necesitados y sobre todo a la verdad, frente a la mentira organizada que, sin duda, ya se instaló en muchos medios de comunicación que del periodismo no sólo han hecho un negocio, sino un instrumento para defender a unos pocos, en detrimento de las mayorías nacionales.
El Nuevo Cambio, por lo tanto, estará al servicio de la gente, de esos miles de bolivianas y bolivianos que intentan estar bien informados, en todos los temas, no sólo políticos, sino deportivos, de ciencia y tecnología, en salud, economía, cultura e internacional, entre otros.
Las nuevas tecnologías nos permiten llegar a todos, pero para hacer un buen periodismo, sobre todo serio, que refleje la realidad, sin seguir esa línea mayoritaria que se impuso en los medios, no solo en Bolivia, sino en muchos países del mundo, del espectáculo, el sensacionalismo, de las denominadas noticias amarillas, solo para satisfacer el morbo de algunas personas.
Para El Nuevo Cambio, la información será principalmente la búsqueda de la verdad, no nos interesa destruir a nadie con mentiras, ni ganar espacios haciendo daño a las personas, ni derrotar a ningún enemigo político ficticio.
Por supuesto, nuestro periódico digital, tendrá una línea política, como lo tienen todos los medios del mundo, pero no la usaremos para hacer daño a nadie, por el contrario, nos servirá para trabajar con la gente, comprender sus problemas y ayudarlos, reflejar y contar sus historias.
Somos seguidores y militantes del proceso de cambio que hace más de 14 años, con la Revolución, Democrática y Cultural, cambió Bolivia, reconoció a muchas culturas que estaban marginadas, invisibles, discriminadas, aisladas y le devolvió a bolivianas y bolivianos sus derechos, sin importar el color de su piel, sus vestimentas o en qué lugar habita, sea en el área urbana, suburbana o el campo. Por eso se fundó el estado Plurinacional de Bolivia.
Haremos todos los esfuerzos necesarios para ejercer un periodismo al servicio de las personas, de los seres humanos particularmente y de los seres vivientes y de la naturaleza, porque, está claro, que sin ella no podríamos vivir.
Como lo dijera hace muchos años el periodista polaco Ryszard Kapuscinski “para ejercer el periodismo, ante todo, hay que ser un buen hombre o una buena mujer, buenos seres humanos. Las malas personas no pueden ser buenos periodistas”. Desde nuestro espacio periodístico, nuestro objetivo y horizonte será el servicio a la patria y a la gente.