Kazán, Rusia | Agencias
Durante cumbre de los BRICS, celebrada en la ciudad rusa de Kazán, los representantes emitieron una declaración final en la que piden terminar con la guerra en Medio Oriente e instan a brindar contención a ambas partes para evitar un conflicto aún mayor en la región.
El foro de países emergentes también presentó ofertas de mediación para que Ucrania y Rusia cesen su enfrentamiento, de la mano de Brasil y China.
En paralelo el presidente ruso, Vladimir Putin, recibió al líder venezolano, Nicolás Maduro, que lleva a cabo su primer viaje al exterior desde la crisis política de julio en la nación caribeña.
Putin advirtió este jueves que Oriente Próximo ha sufrido «una reacción en cadena» durante el último año que ha puesto a la región «al borde de una guerra a gran escala», al tiempo que ha argumentado que una paz duradera en la zona pasa por «corregir la injusticia histórica con el pueblo palestino» a través de la materialización del Estado de Palestina.
«Los combates en Gaza que empezaron hace un año se han propagado ahora a Líbano y otros países en la región se han visto afectados», dijo.
«El nivel de confrontación entre Israel e Irán ha aumentado drásticamente. Todo ello parece una reacción en cadena que pone a todo Oriente Próximo al borde de una guerra a gran escala», sostuvo.
Por ello, Putin ha hecho hincapié en que «un requisito básico para restaurar la paz y la estabilidad en los territorios palestinos es la solución de dos Estados, aprobada por resoluciones del Consejo de Seguridad y la Asamblea General de la ONU», al tiempo que ha insistido en que Moscú busca «hacer contribuciones significativas a la estabilización» de la situación en la región.
Guerra
En cuanto a la guerra entre Ucrania y Rusia, el texto retoma las posiciones de algunos Estados miembros sobre cómo lidiar con la crisis. El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, junto con su par chino, Xi Jinping, centraron sus discursos inaugurales en la cumbre en la defensa de un mundo multipolar, en el que se promuevan relaciones equilibradas entre Estados, al tiempo que advirtieron sobre el riesgo de una escalada en Ucrania y Medio Oriente.
Xi destacó la necesidad de «que se escuche la voz de los países del Sur Global» e instó a los BRICS a «liderar la reforma de la gobernanza global, basada en un verdadero multilateralismo». Lula manifestó preocupaciones similares en su participación mediante videoconferencia, luego de que un accidente doméstico impidiera su viaje a Kazan. Durante la misma adelantó que la «lucha por un mundo multipolar» y la profundización de «relaciones menos asimétricas» serán la piedra angular a través de la cual girará la presidencia brasileña de los BRICS para el próximo año.