Caracas y Bogotá | Agencias
El Gobierno de Venezuela denunció ante embajadores que las actas electorales divulgadas por el antichavismo son falsas y pretenden “desconocer los resultados” de las elecciones presidenciales, en las que el ente electoral ratificó a Nicolás Maduro como ganador, una victoria cuestionada dentro y fuera del país. Mientras tanto, los gobiernos de Brasil, Colombia y México insisten en que el Consejo Nacional Electoral (CNE) venezolano presente las actas y que haya “una verificación imparcial de los resultados”
La mayor coalición opositora, Plataforma Unitaria Democrática (PUD), divulgó en una página web “el 83,5 %” de las actas electorales que, insisten, demuestran el triunfo de su candidato, Edmundo González Urrutia, algo que desestima el Gobierno de Venezuela al considerar que son “documentos forjados”.
Según una nota de prensa de Cancillería, la vicepresidenta Delcy Rodríguez aseguró que el dominio de esta web se compró “un día antes de los comicios y no es un mecanismo oficial para proclamar cargos de elección popular”, lo que usurpa “las funciones del CNE” para “generar confusión sobre los resultados reales de las elecciones”.
Según el Gobierno, este “fraude bárbaro e inédito” generó “implicaciones violentas”, en referencia a las protestas poselectorales en todo el país contra el resultado que se anunció por el CNE, en las que más de 2.000 personas se detuvieron por causar, entre otras cosas, daños en varias instituciones públicas y otros sitios, lo que conlleva “delitos”, según las autoridades venezolanas.
El, el Centro Carter, observador de las elecciones presidenciales por invitación del CNE, por ser una entidad confiable, manifestó que ha analizado datos electorales que confirman que el ganador de los comicios es el opositor González Urrutia y no Maduro -como coinciden varios países-, algo que calificó el Gobierno como “golpe de Estado”.
Petición
Brasil, México y Colombia, las tres potencias latinoamericanas gobernadas por la izquierda que han puesto a andar un esfuerzo de mediación en la crisis poselectoral de Venezuela, han insistido este jueves en un comunicado conjunto que consideran “fundamental” que el CNE presente los resultados de las elecciones presidenciales del 28 de julio de 2024 “desglosados por mesa de votación”.
Los gobiernos de Luiz Inácio Lula da Silva, Andrés Manuel López Obrador y Gustavo Petro, que han evitado reconocer la supuesta victoria de Maduro sin quemar los puentes con el chavismo, también se desmarcaron en el comunicado de la iniciativa del heredero de Hugo Chávez de llevar la disputa a otras instancias.
“Al tomar nota del proceso iniciado ante el Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela (TSJ) en torno al proceso electoral”, los tres países, que han mantenido una estrecha comunicación, “parten de la premisa de que el CNE es el órgano al que le corresponde, por mandato legal, la divulgación transparente de los resultados electorales”. Las cancillerías también “reafirman la conveniencia de que se permita la verificación imparcial de los resultados, respetando el principio fundamental de la soberanía popular”.