La Paz, 9 de noviembre (El Nuevo Cambio).- En medio de una serie de protestas, principalmente del transporte urbano e interdepartamental, se mantienen las largas filas de vehículos que desde hace días intentan conseguir diésel y gasolina, en las capitales departamentales de Santa Cruz, La Paz y Cochabamba.
A pesar de que el gobierno anunció que la distribución de esos combustibles se normalizará este fin de semana, varias estaciones de servicio se mantienen sin ambos carburantes, ante las protestas de los choferes, que en algunos casos incluso ya bloquearon algunas calles.
A estas protestas se sumaron este viernes también los ganaderos, avicultores, porcinocultores y otros sectores que realizaron vigilias y protestas frente a las oficinas de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos.
Los representantes de estos sectores ratificaron que la falta de diésel y gasolina, les está ocasionando serios problemas, con pérdidas económicas enormes y la posibilidad de que en un inmediato futuro no haya producción y alimentos.
También afirmaron que el presidente Luis Arce y autoridades de YPFB mienten al afirmar que la falta de carburantes se debe al bloqueo de las carreteras, cuando en realidad es que el gobierno no tiene recursos económicos para pagar a los proveedores.
Las filas en todos los surtidores principalmente de Santa Cruz, La Paz y Cochabamba y otras capitales departamentales, son una comprobación de que los bloqueos de carreteras no tenían nada que ver con la falta de combustible, dijeron.
Según los productores agrícolas, la falta de combustible, principalmente el diésel, afecta fundamentalmente a ese sector porque no existe suficiente tiempo para poder abastecer el mercado con productos y alimentos.