Al menos tres muertos deja ataque masivo ruso con drones y misiles sobre Ucrania

Moscú y Kiev | Agencias

Rusia lanzó en las primeras horas de este lunes un ataque masivo con misiles y drones que afectó a 15 regiones de Ucrania, más de la mitad del país. Al menos tres personas murieron, una en la ciudad occidental de Lutsk, otra en la región central de Dnipropetrovsk y otra en la región parcialmente ocupada de Zaporiyia, en el sureste. Otras 13 resultaron heridas.

En el ataque se utilizaron drones, misiles de crucero y misiles balísticos hipersónicos Kinzhal, lo que provocó cortes de electricidad en toda Ucrania.

También se escucharon explosiones en Kiev que interrumpieron el suministro de electricidad y agua. Pero los daños se extendieron a otras regiones de Ucrania, dijo el primer ministro del país, Denys Shmyhal.

La empresa privada de energía de Ucrania, DTEK, realizó apagones de emergencia para estabilizar el sistema, y dijo que «los trabajadores de la energía en todo el país trabajan las 24 horas del día, los 7 días de la semana para restablecer la luz».

En Sumy, una provincia fronteriza con Rusia en el este, los funcionarios locales dijeron que 194 asentamientos sufrían un apagón total, mientras que otros 19 tenían un apagón parcial.

Las autoridades ucranianas han recibido la orden de abrir «puntos de invencibilidad», o lugares que sirven de refugio donde la gente puede cargar sus dispositivos y refrescarse durante los cortes de energía. Mientras tanto, la vecina Polonia activó sus defensas aéreas y las de la OTAN en la parte oriental del país.

Ucrania, que ha desatado una poderosa ofensiva militar en la región del Kursk, habría herido a cuatro personas durante un ataque con drones durante la noche y la mañana de este lunes en la región rusa de Saratov. El Ministerio de Defensa de Rusia dijo que se interceptaron un total de 22 drones ucranianos.

Ucrania ha vuelto a hacer llamamientos a los aliados para que le proporcionen armas de largo alcance para poder atacar con mayor eficacia el territorio ruso.

«Para detener el bombardeo bárbaro de las ciudades ucranianas, es necesario destruir el lugar desde el que se lanzan los misiles rusos», declaró este lunes el primer ministro ucraniano, Denys Shmyhal.

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