Michigan | Agencias
El candidato republicano Donald Donald celebró su primer acto de campaña de cara elecciones a las presidenciales de Estados Unidos, luego de que fuera víctima de un intento de asesinato el sábado pasado.
«Recibí un balazo por la democracia», indicó durante su presentación en Grand Rapids, el sábado en el estado de Michigan.
«No soy en absoluto extremista», insistió Trump para descartar sus supuestos vínculos con el «Proyecto 2025», un manifiesto radical liderado por figuras cercanas a él que ha sido descrito por sus opositores como una lista de deseos autoritaria y derechista.
En su discurso el expresidente, que apareció con un vendaje más pequeño que el que le cubrió la oreja en los últimos días después de sufrir el atentado en Pensilvania, prometió «un maremoto monumental» a favor de los republicanos en los comicios del 5 de noviembre.
Durante casi dos horas de acto, Trump renovó su diatriba contra los inmigrantes, a quienes acusa de los peores crímenes y prometió la «mayor operación de expulsión» en la historia de Estados Unidos.
Además, se burló de los demócratas «que no saben quién es su candidato» y aseguró que el presidente Joe Biden, quien enfrenta duras críticas sobre su aptitud física y mental para seguir en campaña, es un «estúpido» y tiene un coeficiente intelectual de «50, 60 o 70».
Antes habló su compañero de fórmula, el senador J.D. Vance, originario del vecino estado de Ohio, quien apuntó contra la vicepresidenta Kamala Harris, un nombre que suena para reemplazar la candidatura de Biden si se decide a renunciar.
«Serví en el Cuerpo de Marines de los Estados Unidos y comencé un negocio. ¿Qué has hecho además de cobrar un cheque?», dijo sobre la exsenadora de California.
En la otra orilla, Biden, de 81 años, y su equipo de campaña se han mantenido públicamente firmes en que permanecerá en la carrera, aunque algunos informes sugieren que han comenzado discusiones en su círculo íntimo sobre cómo exactamente podría hacerse a un lado debido a su salud física y mental.
Ha habido muchas especulaciones sobre quién podría reemplazarlo. Como vicepresidenta, Harris parece estar mejor posicionada para esa tarea.
La influyente senadora demócrata Elizabeth Warren dijo a la cadena MSNBC que le da «mucha esperanza» que, si Biden «decide dar un paso atrás, tengamos a la vicepresidenta Kamala Harris, que está lista para dar un paso al frente, unir al partido, enfrentarse a Donald Trump y ganar en noviembre».