El presidente de Irán, Ebrahim Raisi, ha declarado este domingo que los militares del país persa escribieron «una nueva página» en su historia al darle «una lección al enemigo sionista» atacando sus blancos militares en los territorios ocupados de Palestina.
Raisi afirmó que la operación ‘La Verdadera Promesa’, emprendida contra Israel, se llevó a cabo en «defensa legítima» de Irán en respuesta al mortífero bombardeo israelí del Consulado de la República Islámica en Damasco el pasado 1 de abril.
El mandatario iraní subrayó que durante los últimos seis meses, y especialmente en los últimos diez días, su Gobierno recurrió a «todos los instrumentos y organismos regionales e internacionales» para llamar la atención de la comunidad internacional sobre la inacción del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas ante las continuas violaciones de las normas internacionales por parte de Tel Aviv.
A falta de la debida reacción y rechazo unánime tras el ataque israelí contra una misión diplomática extranjera, Irán actuó «en defensa de la integridad, la soberanía y los intereses nacionales», contribuyendo a la fomentación de la estabilidad en la región al apuntar contra las bases militares del país hebreo, manifestó Raisi.
En ese contexto, calificó a Israel como una amenaza a la paz y seguridad regional, dada también su «campaña de genocidio palestino» e impunidad con la que prosigue con el apoyo de EE.UU. y otros países occidentales.
El mandatario iraní subrayó que cualquier nuevo acto de agresión israelí contra la nación persa conllevará una respuesta más dura, decisiva y violenta de parte de Teherán. Por ello, instó a la comunidad internacional a dejar de apoyar al «régimen opresor sionista», que se nutre de ese respaldo para intensificar los ataques y burlarse de todas las normas del derecho internacional.
RT