Beirut | Agencias
El Ejército israelí bombardeó este viernes el Dahye, un suburbio en el sur de Beirut considerado bastión del grupo chií Hizbulá, después de ordenar a los residentes evacuar la zona y entre una oleada de ataques en el Líbano que han causado al menos 43 muertos en las últimas horas.
Los bombardeos tuvieron lugar en la mañana del viernes, según el medio libanés Al-Mayadeen, y por el momento se desconce si provocaron muertos o heridos.
Poco antes, el portavoz en árabe del Ejército israelí, Avichay Adraee, urgió a los vecinos de varios edificios situados en la zona de Ghobeiry a evacuar “inmediatamente y mantenerse alejados de ellos a una distancia no menor de 500 metros”.
El Ejército israelí ya bombardeó el Dahye, incluidos dos centros de la Defensa Civil, el pasado miércoles y jueves, también después de solicitar la evacuación de varios edificios de la zona, según informó la agencia de noticias EFE.
Las fuerzas armadas aseguraron entonces en un comunicado haber destruido nueve almacenes de armas y centros de mando del grupo chií “incrustados” en áreas civiles, argumento que Israel repite para justificar sus ataques contra infraestructura civil en Gaza y Líbano.
Este viernes, sus aviones de combate atacaron los centros de mando de la fuerza de élite del grupo chií Hizbulá (Radwan) en la zona de Nabatieh, en el sur del Líbano.
Entre los objetivos atacados se encuentra un emplazamiento de infraestructura terrorista utilizado por la fuerza de élite de Hizbulá “para llevar a cabo ataques terroristas contra el Estado de Israel y nuestras tropas”, según un comunicado castrense.
El jueves el ministro de Exteriores israelí, Gideon Saar, reiteró en una conversación que mantuvo con su homólogo francés, Jean-Noël Barrot, que hay “un deseo de lograr un alto el fuego” en el Líbano para permitir que los más de 60.000 evacuados del norte puedan regresar a sus casas, y que se están produciendo “avances” en las negociaciones.
En más de un año de conflicto han muerto en el Líbano al menos 3.386 personas y otras 14.417 han resultado heridas, entre ellas 220 menores de edad y 658 mujeres, según la última actualización del Gobierno libanés, anterior a estos últimos ataques.
