Buenos Aires | Agencias
Argentina inició este miércoles un nuevo paro de transporte encabezado por la Mesa Nacional del sector al que el gobierno de Javier Milei teme.
Desde tempranas horas de este miércoles se notó la falta de servicios de trenes de pasajeros ni de carga, tampoco funcionaron los puertos y barcos; los camiones de carga quedaron paralizados, al igual que la mayor parte de las aerolíneas comerciales de pasajeros, según informó el diario Página 12.
Los gremios plantean a través de una importante huelga su disconformidad con las políticas de ajuste del gobierno de Milei, la caída del poder adquisitivo de los salarios y el plan de privatización y aumento de las tarifas que la Casa Rosada lleva adelante. También habrá apoyo de otros sectores como la salud, la educación y de organizaciones de la sociedad civil.
En tanto, la Unión de Tranviarios Automotor (UTA), conducida por Roberto Fernández, anunció que mantendrá el servicio de colectivos este miércoles, pero realizará su propia medida de fuerza durante el jueves 31.
Pablo Moyano, uno de los impulsores de la Mesa Nacional del Transporte donde confluyeron todos los gremios relacionados con la actividad, consideró -durante una entrevista con AM 750- que la masividad de la protesta ejercerá presión sobre el resto del movimiento obrero, esto es la CGT, para que los sindicatos «tomen una medida más contundente en noviembre».
Aseguró que hay bronca social acumulada debido a las medidas del Gobierno, al que calificó de «salvaje» y «dañino», y que «la grieta» que atraviesa a la sociedad no influirá en la convocatoria.