Ciudad del Vaticano | Agencias
Ni una semana ha pasado desde que el papa Francisco dijera que «ya había mucho mariconeo (o mariconería)» para defender la posición de no admitir a homosexuales en los seminarios, durante la reunión a puerta cerrada en la asamblea de la CEI. Pues bien, el pontífice ha vuelto generar una gran polémica tras publicar varios medios italianos unas supuestas palabras machistas del Papa.
En una reunión con jóvenes sacerdotes, Francisco les habría pedido que dejasen de lado los cotilleos y los chismes, que son «cosas de mujeres».
«Nosotros llevamos pantalones, debemos decir las cosas», habría dicho el Papa.
Todo sucede cuatro días después de sus desafortunadas afirmaciones sobre los homosexuales tras las que el Vaticano tuvo que emitir un comunicado pidiendo disculpas.
«El papa Francisco conoce los artículos publicados recientemente sobre una conversación, a puerta cerrada, con los obispos de la Conferencia episcopal italiana (CEI) y como afirmó en varias ocasiones: «¡En la Iglesia hay lugar para todos, para todos! Nadie es inútil, nadie sobra, hay sitio para todos. Tal como somos, todos nosotros», decía la nota.
