Buenos Aires | Agencias
El expresidente argentino Mauricio Macri encabezó un acto de relanzamiento del partido Propuesta Republicana (Pro) en el barrio de La Boca, en Buenos Aires, en medio de disputas internas por el rol del espacio frente al Gobierno de Javier Milei.
Macri, quien asumió en mayo la conducción del Pro, se ha posicionado como un aliado del líder libertario desde antes del balotaje del pasado noviembre, aunque dentro del partido es objeto de cuestionamientos de algunos sectores que reclaman recuperar autonomía política y retomar su identidad.
«El presidente nos ha propuesto una fusión», confesó el empresario que gobernó Argentina entre 2015 y 2019. Su respuesta, según reveló, fue ambigua. Ofrecerá ayuda para realizar el «cambio» que necesita el país, pero manteniendo distancia al menos por un tiempo.
«Le expresé que en el siglo XXI nadie se casa sin conocerse y convivir. Sí le sugerí ir de menor a mayor, ofreciéndole nuestra ayuda para fortalecer su gestión con la única vocación de que el cambio se haga realidad», señaló.
El vínculo entre Macri y Milei, basado en sus coincidencias ideológicas, tuvo oscilaciones desde que el libertario asumió la presidencia el pasado diciembre. Macri apoyó con fuerza al Gobierno cuando buscaba la aprobación de la polémica ley Bases, pero más tarde le reclamó que le devuelva a la ciudad de Buenos Aires millonarios fondos de coparticipación impositiva.
El jueves, Macri fue recibido por Milei en la Quinta presidencial de Olivos, en un encuentro reservado que duró cuatro horas, pero del que trascendió muy poco, reportó el diario La Nación.